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Según el economista Jürgen Donges, lo que está sucediendo en Cataluña es “disparatado, anticonstitucional y no tiene ningún recorrido” 

El catedrático de la Universidad de Colonia, Jürgen Donges, ha explicado en 'Herrera en COPE' que en Alemania, la visión que se tiene del desafío independentista de Cataluña es “de algo disparatado. No lo entiende nadie”. Ha indicado que “los alemanes somos adictos a cumplir reglas y normas. Lo que están haciendo es algo anticonstitucional y no tiene ningún recorrido”.

Añade que tampoco se entiende desde el punto de vista económico porque “es una de las regiones más prósperas de España y de la Unión Europea, y si se sepan saldrían de la Eurozona y del Eurogrupo” además matiza, “se está hablando de independencia, cuando en realidad lo que están buscando es una secesión ilegal”.

El economista reconoce que para los alemanes “impresiona que el gobierno tome medidas mesuradas, muchos se equivocan y piensan que las actuaciones sobre Cataluña son ordenadas por Mariano Rajoy, cuando en realidad los que deciden son los jueces. No saben diferenciar”.

Respecto a la campaña electoral en Alemania, el economista señala que en esta ocasión habrá dos novedades. Por un lado, señala, el reingreso del partido liberal Democrático (FDP) en el Parlamento después de cuatro años y por otro la incorporación del partido ultraderechista, llamado Alternativa para Alemania.

Para Jürgen Donges “lo que se discute ahora es quién será el tercer partido alemán más importante, porque sería el líder de la oposición si hay de nuevo una gran coalición, porque sería horroroso que fuera la ultraderecha”.

El catedrático de la Universidad de Colonia apunta a que si no ocurre algo excepcional, Angela Merkel volverá a ser la canciller en Alemania “según las encuestas, a nivel de partido conseguiría el 37% de los votos, frente al 22% que alcanzara el partido de Martin Schulz. Si es así, Schultz tendrá que decidir si entra en la coalición o no”.

Ha alabado al gobierno de Angela Merkel porque “no le gusta polarizar, ni que haya crispaciones. Tiene una capacidad de análisis notable y sabe escuchar, y se le ve más como moderadora que como jefa” aunque matiza que “muchas veces, quisiéramos que fuera como la imagen de dura que se da de ella, porque hacen falta medidas rápidas en educación o en seguridad, y tarda mucho en tomar las decisiones.