COPE
El presidente del Gobierno, inaugura el puente que une Cádiz y Puerto Real, un proyecto que ha tardado ocho años en ser construido.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, inaugura este jueves el puente "Constitución 1812", que une Cádiz y Puerto Real y es uno de los más altos del mundo, un proyecto que ha tardado ocho años en ser construido y que ha contado con una inversión de 511 millones de euros.
La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz; y la ministra de Fomento, Ana Pastor, participarán también en la inauguración de esta infraestructura, todo un hito de la ingeniería española, en un acto al que también acudirá el alcalde de Cádiz, José María González Santos, "Kichi".
El regidor de Puerto Real, Antonio Romero, también de Podemos como el de Cádiz, ha anunciado que no asistirá a la inauguración en protesta por la "exclusión absoluta de la ciudadanía", por lo que probablemente seguirá el acto "detrás del cordón policial acompañando a mis vecinos".
La inauguración de este puente, diseñado por el ingeniero Javier Manterola, es un momento histórico para los vecinos de la bahía de Cádiz, que han seguido durante ocho años las obras de su construcción.
El puente "Constitución 1812" tiene una longitud de cinco kilómetros, de los que 3.092 metros transcurren salvando el mar, lo que le convierte en más largo que puentes tan conocidos como el Golden Gate y el de Brooklyn, en Estados Unidos.
Tiene una anchura de 36,8 metros y una altura de 185 metros que le convierte en el segundo puente marítimo de mayor gálibo vertical del mundo, después del de Verrazano Narrows de Nueva York y por delante del Golden Gate de San Francisco
EL MUNDO
El nuevo puente de Cádiz, un coloso de 510 millones de euros
- En el viaducto se han empleado 100.000 metros cúbicos de hormigón
- Sus cifras son apabullantes: 185 metros de alto y 5 kilómetros de longitud
El puente de la Constitución de 1812, que une las localidades de Puerto Real y Cádiz, es la infraestructura más compleja y costosa emprendida en los últimos años por el Ministerio de Fomento. El viaducto, que será inaugurado el jueves por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, pretende ser una solución a los frecuentes problemas de tráfico en los accesos a la capital gaditana.
El proyecto es un diseño del ingeniero Javier Manterola ejecutado por Dragados, empresa que también realizó la única vía de entrada con el que contaba la ciudad hasta esta semana, el puente de Carranza. Desde la adjudicación en 2007, con Magdalena Álvarez (PSOE) al frente del Ministerio de Fomento, han transcurrido ocho años, varias fechas de inauguración aplazadas y un importante sobrecoste:de 288 a 510 millones de euros.
El nuevo viaducto sobre la bahía de Cádiz es, según los datos facilitados por Fomento, el segundo puente atirantado más grande del mundo, con 69 metros de gálibo vertical o altura sobre el nivel del mar. Los pilonos que sustentan los 176 tirantes de acero alcanzan los 185 metros de altura, haciéndose un lugar entre las torres más altas de España. Estas circunstancias concretas sitúan a este puente en altitud tan sólo por detrás del Verrazano de Nueva York, de 211 metros de altitud.
La longitud también viene acompañada de cifras de récord. El nuevo acceso a Cádiz mide tres kilómetros de largo, cinco si se cuentan los tramos de Cádiz y Puerto Real. Unas medidas superiores a las de viaductos mundiales emblemáticos como el Golden Gate de San Francisco, que posee 2,7 kilómetros, o el puente de Brooklyn de Nueva York, cuya extensión es de 1,8 kilómetros. La infraestructura con 36 metros de ancho dispondrá de dos carriles por sentido y uno reservado para el transporte público.
Otro de los aspectos más singulares que destacan desde Fomento es que la estructura atirantada mide 1.180 metros de longitud, la mayor de España, y que existe una luz libre entre pilonos, o espacio entre las dos torres, de 540 metros. El viaducto se divide en cuatro partes: los accesos a Cádiz y Puerto Real, el tramo atirantado y el tramo desmontable. Una parte que consta de 150 metros de longitud y que permitirá el paso de embarcaciones de grandes dimensiones. Solamente esta pieza tendrá un peso de 4.000 toneladas.
La monumental obra de Dragados a petición del Ministerio de Fomento puede ser considerada como un gigante de hormigón por los 100.000 metros cúbicos de este material empleados y como un pesado gigante de acero por sus 70.000 toneladas de peso. Por su parte, las 61 dovelas que componen la infraestructura tienen cada una de ellas 20 metros de longitud por 34,3 metros de anchura y un peso de 300 toneladas.
La inauguración colmatará este jueves un periodo de obras de más de ocho años. Aunque la espera de los gaditanos ha sido mucho más larga. De hecho, Cádiz llevaba décadas reclamando este tercer acceso, segundo a través de un puente, para descongestionar el tráfico rodado en la capital gaditana. Finalmente, con Teófila Martínez (PP) en la Alcaldía, la obra se inició en 2007, con intención de acabar la obra para el Bicentenario de la Constitución de 1812. Su finalización ha llegado definitivamente tres años después.
En un principio, Fomento presupuestó unos 288 millones de euros para el puente, cuyo coste final ronda los 510 millones de euros.
Todo está listo ya, por tanto, para la apertura de un puente que enlazará el muelle de La Cabezuela de Puerto Real, a las afueras de la localidad, con la avenida de la Bahía de Cádiz, a pocos metros del casco antiguo de la ciudad. El proyecto ha obligado también a la adecuación de la carretera que enlaza con el viaducto, una intervención que durante años ha causado grandes molestias a vecinos y comercios de la zona.
A la cita de este jueves han sido invitados los alcaldes de Cádiz, José María González, y Puerto Real, Antonio Romero, y también la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz. Todos ellos han mostrado su malestar por la premura con que se les ha anunciado la fecha definitiva, de la que se han enterado por la prensa.
