Francisco Vázquez ha aclarado que la candidatura será decidida por los partidos políticos, buscando al candidato idóneo que inspire confianza tanto al PP como al PSOE.
El ex embajador de España en el Vaticano Francisco José Vázquez ha calificado de "paradójico" que en el PSOE pueda haber algunos sectores minoritarios, que, a su juicio, reflejan la pluralidad interna del propio partido, que "prefieran mantener durante un año la interinidad en un cargo institucional tan importante como es el del Defensor del Pueblo antes que designar un compañero de partido por sus convicciones religiosas".
En declaraciones a Onda Cero recogidas a Europa Press, Vázquez ha comentado que "parece que su figura, por su trayectoria, no provoca rechazos en el PP" y ha añadido que estas convicciones "son personales y las mismas que tenía cuando militaba en el partido en la clandestinidad y cuando el PSOE consideró, a lo largo de 36 años de persona pública, que era la persona idónea para ser alcalde, diputado, senador, embajador o miembro de la ejecutiva de Felipe González o Joaquín Almunia".
Por ello, ha opinado que "no tendría lugar una posición que en sí misma sería tanto como poner un veto a una persona por sus propias convicciones religiosas". No obstante, ha aclarado que la candidatura será decidida por los partidos políticos, buscando al candidato idóneo que inspire confianza tanto al PP como al PSOE. "Si se considera que soy idóneo, encantado, y si no, aquí paz y después gloria, me dedicaré a mi actividad profesional e iré viendo institucionalmente cómo puedo desarrollar mi vocación política", ha indicado.
Asimismo, ha defendido que el Defensor del Pueblo "es un cargo en el que se trata de buscar a una persona que consiga reunir el consenso de los dos principales partidos políticos". También ha reconocido que le consta el apoyo a su persona por parte del presidente del Gobierno del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero y del vicesecretario general del PSOE y ministro de Fomento, José Blanco.
Vázquez ha finalizado recordando que votó contra la Ley del Aborto y contra la Ley del matrimonio homosexual y que lo hizo "en conciencia, trasladándoselo a la dirección del partido y poniendo a su disposición sus actas de diputado y de senador", al tiempo que ha apuntado que "en aquel momento el PSOE respetó su libertad de conciencia".
