Bueno, el nombre del día hoy en todos los medios, desde luego los españoles, también los franceses y todos aquellos medios deportivos del mundo entero en la figura de un tipo asombroso. Yo ya no sé qué decir de Rafael Nadal porque es que ya creo haberlo dicho todo. Y como yo todos los que hoy escriben Nadal. Carrascal hace, por ejemplo, su columna en 'ABC' por estas fechas y es la misma. Y él lo dice: “Yo estoy encantado de no hacerla, pero es la misma. Tengo que hablar bien de Rafael Nadal porque ha vuelto a ganar Roland Garros”. Y ya llevamos 12. El que más ganó Roland Garros fue Björn Borg. Él aportó historia de la vida y ganó seis. Y ya eso, desde luego, eso es una sobrada, ¿pero ganar 12?
Ganó a Federer, ayer ganó a Thiem, al austriaco que es un pelotazo de tenista, y siempre se reinventa. Parece que cae, que ya no va a poder recuperarse, que la rodilla, que el codo, que... En fin, esas cosas que le pasan a los deportistas de élite.
Bueno, pues no, se reinventa, se vuelve a meter en una pista, entrena hasta desfallecer y como tiene mucho talento gana, con lo cual, el mensaje que deja Rafa Nadal en la gente es un mensaje magnífico. Es el que se subraya hoy en todas partes. Que desde la humildad, sin un solo gramo de soberbia, lo cual es muy difícil tener algo de soberbia cuando ganas 12 Roland Garros, traslada un ejemplo de esfuerzo. Teniendo talento como tiene para jugar al tenis, el esfuerzo es imprescindible para eso traducirlo en victoria, para recuperarse, para reinventarse, para volver a hacerse otra vez.
Yo es que me estoy escuchando y es la entradilla que hice el año pasado, exactamente la misma, o la última vez que ganó Roland Garros. Yo también, como Carrascal, lo que estoy deseando el año que viene es volver a hacerla. La guardo y, oiga, la pongo. Y, además, fíjense, no solo ganas sino que sabe ganar. Sabe ganar, como les digo, sin soberbia. Y la prueba es el mensaje que le ha dejado o como ha definido a Thiem, a su rival que, como les digo, es un pedazo de tenista. “Él es un gran trabajador, una gran persona, un buen ejemplo para el circuito, si algún día pierdo no me importaría que fuera contra ti”. Enhorabuena a Rafael y a todo su equipo, a Carlos Moyá, a su tío, a toda su familia.
Los pactos para los gobiernos
¿De los pactos qué?
Bueno, antes de hablarle de los pactos, esta semana finaliza el juicio del procés. Esta semana se vivirá la última sesión, que serán los alegatos antes de que quede visto para sentencia. Cada acusado tendrá 15 minutos para soltar su soflama. Bueno, en fin, la soflama que soltarán pues es perfectamente previsible. Perfectamente previsible. Será un alegato político: somos presos políticos, presos de confianza, nosotros no hemos dado ningún golpe, nosotros simplemente pusimos las urnas para votar, queríamos porque tenemos derecho a la autodeterminación, etcétera, etcétera, etcétera.
Eso que sostiene, por cierto, aparte de la izquierda española, no digamos el separatismo y el nacionalismo. No, no, es que una buena parte de la izquierda española sostiene que son presos políticos. Desde luego Podemos, desde luego Izquierda Unida, si es que queda algo de Izquierda Unida. Es decir, que son presos de conciencia que están ahí porque el régimen español es despiadado para con la libertad de conciencia de los individuos. Ojo, que no se olvide eso.
¿Y del pactódromo?
Bueno, pues del pactódromo que todo se ablanda en la vida, qué les voy a contar. No hay rigidez, dura lo que dura, pues las cosas duras, lo sabemos todos, no duran eternamente. El paso del tiempo reblandece las cosas. Y también reblandece las posiciones, los teatros, los riodones, los cuentos que han puesto en marcha los partidos políticos en estos pactos: el con este yo no quiero, con aquel tampoco, con aquel no voy a hablar, con el otro... Buah, pues ya están hablando hasta Ciudadanos y Vox y es verdad que en voz baja y sin fotos porque todavía a Ciudadanos le da asquito que le vean junto a alguien de Vox.
Bueno, pues ayer Aguado se vio con la señora Rocío Monasterio que, como decía decía Joaquín Leguina el otro día, es una señora, oiga, con la cabeza muy bien puesta. Es una gran profesional, una arquitecta magnífica y es una señora con la que, desde luego, merece la pena hablar.
Bueno, pues lo ha hecho y habrá visto que no tiene cuernos, rabo y esas cosas. Y un tridente en la mano. Y veremos si se entienden, aunque sea para que Ciudadanos presida la Asamblea Regional de Madrid.
Y, luego, Ciudadanos, pues sí, aquí con unos y allí con otros. Van a negociar para Castilla y León con el PSOE, para Murcia también con el PSOE y veremos si la negociación en Aragón con el PP sirve para que forme el PP gobierno en Aragón.
Y luego está Barcelona, la ciudad de Madrid, y luego Barcelona, donde parece que si, desde luego, solo puede gobernar o Maragall o Ada Colau, Ada Colau es lo menos malo. ¿Cómo será lo otro, cómo será Maragall para que Ada Colau nos parezca menos malo? Imagínense ustedes.
La ciudad de Barcelona solo dedicado al procés. Vamos, con Ada Colau esperemos que el marcaje del Partido Socialista catalán y de Manuel Valls le haga ser un poco productiva, pero con Ada Colau la ciudad no estaba puesta ni siquiera al servicio del procés. A nada porque no sirve para nada. ¿Pero cómo será el otro para que hagamos esta afirmación?