La comparecencia de Rajoy en el juicio al 'procés' se retrasa hasta que acaben de declarar los acusados 

COPE

Señoras, señores, me alegro. ¡Buenos días!

¿Qué tal les va, damas y caballeros? Es viernes. Es 22 de febrero del 2019. Hace un tiempo muy bueno. Es tan bueno que es aburrido. Lo suyo es un poco de inestabilidad propio del mes de febrero, febrerillo loco, pero la verdad es que este febrero está demasiado cuerdo. Demasiado cuerdo.

Hoy lamenta la radio el fallecimiento, la marcha de una gran voz sevillana de la radio. Los que comenzamos en Radio Sevilla, los que andábamos por allí y los que hacíamos la Cadena SER siempre celebrábamos la voz de Marisa Carrillo, la locutora perfecta, la gran dama de la radio, la señora amable, la voz... Lo digo yo, lo dices tú, el mejor café catunambú. La que siempre será inolvidable para todos los que la hemos conocido y la hemos querido y los que hemos tenido el orgullo de haber trabajado con ella. Un abrazo a toda la familia.

Pues damas y caballeros, hoy, porque ya de seguir hablando de cosas de Sevilla después de lo del Betis de ayer... Había que marcar un gol en la segunda parte pero no solo no lo marcaron, sino que se lo metieron los otros que es un equipo de monjitas. Hay monjitas que juegan mejor al fútbol que estos, pero bueno.

Pues hoy... Dirá usted, ¿no va a hablar usted de lo que ayer fue Cataluña en el...? Pero si es que ayer Cataluña fue un día mucho más normal, solamente alterado por aquellos que se dedican a, viviendo del presupuesto, intentar maltratar y forzar a los demás catalanes, la mayoría de los catalanes, que no sigue las consignas de individuos como Carlos Sastre, que es un asesino. Asesino convicto. Y que preside una suerte de chiringuito al que la Generalidad le da dinero y le hace trabajos sucios como ese: convocar esta serie de huelga de país que ayer no consiguió nada porque los catalanes hicieron lo que tenían que hacer. Fueron a trabajar sin importarles, además, las intimidaciones del matonismo, de todas estas camisas pardas que tanto le gustan a Torra y a toda la basura independentista que está en el poder de la Generalidad. Que está en la Generalidad y que obliga a la Generalidad...

Bueno, a la Generalidad tampoco es que... Parada está siempre. Hombre, no hace nada, igual que el Parlamento catalán, pero ayer querían realizar presión callejera, presión al juicio en el Supremo, pero solo se paralizaron ellos y los que, hombre, a los que les cortaron la libertad. Los catalanes hicieron lo que tenían que hacer y ahí se acabó la historia del día de ayer que seguramente tendrá otra réplica en cualquier otro momento porque esta gente, claro, vive solamente de eso, y el juicio va a durar unos cuantos meses.

Ahora, yo no sé qué pensarán los contertulios que están conmigo hoy en la mesa, pero este es un juicio que se va durmiendo poco a poco. Como no viva alguna jornada especialmente eléctrica, el juicio, fíjense ustedes, esto se comprueba bien el minutaje de las televisiones. Habría que ver minuto a minuto si, efectivamente, el interés periodístico que despierta el juicio es el mismo ahora al quinto día o al sexto día o a la semana y pico de haber comenzado que desde el principio. Es decir, que...

Y ayer hubo dos declaraciones en el juicio que muestran que hay dos formas de ver la vida muy distintas: la forma realista y la otra forma que es la ensoñación, el realismo mágico y el creerse las propias mentiras. Santi Vila, que no está acusado de rebelion y sedicion porque él dimitió del Gobierno antes de que Puigdemont proclamase la declaración unilateral de independencia, lo que dijo, desmontó todo lo que han dicho los Junqueras y compañía.

Lo que dijo fue que, hombre, el Gobierno de España estuvo bien dialogando hasta el final. Mantuvo las vías de diálogo. Mariano Rajoy. Y que ellos, el 25 de octubre, creían que no se iba a tomar ninguna decisión. Es decir, que como mucho se iban a convocar elecciones porque era lo que habían hablado entre ellos. Pero Puigdemont le entró la cobardía de estos seres de plastilina, cómo es él, y no pudo resistir la presión de la Marta Rovira llorando, el otro histérico, el otro enviando tweets, el otro enviando SMS, en la calle pancartas... Es decir, un tío que se viste por los pies aguanta eso porque es lo mejor que le hubiera pasado a la institución y a su tierra, a su comunidad, etcétera, etcétera, etcétera, y asume. Lo que pasa que a todos estos se les pasa rápido.

Pero no, lo que hizo es acongojarse y declarar unilateralmente la independencia. Es lo que cuenta Santi Vila. Porque luego llega Jordi Sànchez y dice todo lo contrario. Jordi Sànchez, que ayer quedó desmentido, por cierto, por la acción del nacionalismo independentista violento en las calles, por toda esa panda de matones de los CDR que tienen que apretar, etcétera, etcétera. Basta ver lo que ayer pasó para que se desmienta que es que Sànchez decía que todo era... Bueno, una lucha pacífica, la violencia pacífica de Cataluña, que es la contradicción en términos que resulta tan plástica para definir estas cosas. Según él, el asedio a la Consejería de Economía fue una jornada festiva en la que... Bueno, pues cantaron canciones de 'La Trinca' y se lo pasaron muy bien y alguna canción de Núria Feliu y... Sin más.

Ahora se suspende el juicio unos días y a la vuelta escucharemos a la señora Forcadell, a mi Mari Carmen, y al señor Jordi Cuixart, pero ya les digo, apuesten porque el interés del juicio vaya día a día, y es lo peor que les puede pasar a ellos, y los otros intentarán cortar los tráficos y hacer, pero el interés desciende y desciende y defiende.