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La marcha a Bruselas del presidente destituido de Cataluña, en el editorial de Carlos Herrera

“Señoras, señores, me alegro. ¡Buenos días!

Bienvenidos damas y caballeros al jueves 2 de noviembre. El día en el que cambia un poco el tiempo. Se anuncian algunas lluvias. Mañana van a hacer acto de presencia por el oeste peninsular, que van a ir entrando poco a poco descargando e irán perdiendo fuerza pero van a dejar algo de agua. Poca va a ser una gran solución pero bueno, al menos bajan las temperaturas y llega el otoño. Esto parece que a uno le corresponde estar en el tiempo que tiene que estar. Esto del tiempo en el que corresponde estar, tiene muchas aplicaciones muy interesares todas ellas.

Hoy es un día de juzgados. Hoy toca ir a la escalinata de la Audiencia Nacional. Y a la puerta principal o lateral del Tribunal Supremo. Allí estaban convocados lo que la justicia considera los 20 responsables del golpe de estado en Cataluña. Previsiblemente irán 15. Verán lastrada su posibilidad de salir tranquilos, porque los otros 5 están en Bruselas.

Puigdemont sigue haciendo de prófugo de la justicia. Ha decidido dar plantón a la justicia. Han llegado a Madrid con un escrache un tanto bochornoso con banderas españolas. Estos señores llegan unos a la Audiencia, otros ante el Tribunal Supremo, y veremos si se solicita medidas cautelares o no.

¿Por qué se solicita prisión provisional?

Esto ocurre cuando hay riesgo de fuga o de destrucción de pistas, algunos datos que puedan ayudar a la instrucción del juez. La Fiscalía se lo pide. Las apuestas están en que no. Estas personas se les han llamado y han ido. Riesgo de fuga, alguno puede decir 'pues mira Puigdemont, arraigo tienen, quizá lo más inteligente sea retirar pasaporte y alguna medida antes que prisión'. Pero aquí no me voy a meter yo allá los jueces y los fiscales.

Después del numerito de la rueda de prensa que dio en Bruselas Puigdemont, y su permanencia en la ciudad protegido por el abogado etarra. Por cierto, Bruselas no es una cuidad barata. Los 4 que van a estar allí con Puigdemont, ¿esto quién lo paga?

¿Qué pretende Puigdemont?

Alargar lo máximo posible el plazo antes de volver a España, y sabe que va a volver detenido.

Pero si yo alargo, y las elecciones son el 21 de diciembre, yo puedo alargar mi permanencia y decir que mis votantes vayan a las urnas. Si la juez de la Audiencia manda una euroorden a Bruselas, ¿qué pasa?

Esto no deja de ser un acuerdo al que han llegado todos los países de la Unión Europea que viene a decir que entre ellos se fían unos de otros. Digamos que Bélgica es el país más rarito en esto, porque tienen jueces muy raritos. Manda la euroorden y cuando te detienen tienen 60 días para enviarte al país donde se ha emitido la euroorden. Si estás de acuerdo en que te extraditen pues se hará en 10 días, cosa que no va a pasar con Puigdemont. Y en este tiempo calienta el tema para las elecciones.

Siempre hay algún medio como el NewYorkTimes que permite un artículo de Junqueras. Y le de pábulo a todos estos cuentistas. La realidad es que el 21 de diciembre hay urnas y un bloque muy motivado a votar, el constitucionalista que salió a la calle el otro día.

Ahora el bloque independentista esta desorientado, ¿Qué ha pasado?

Que parecían un edificio muy sólido y no tenían nada, era un castillo de naipes. Y se ha derrumbado y desmerengado ante las narices de todos los que de buena fe se creían en el proceso. Esto de que hay independentistas de buena fe es que también los hay de mala fe.

Ese bloque necesita movilización, ya empieza la Asamblea Nacional Catalana además de hacer butifarradas a convocar manifestaciones porque dicen que ya votaron done tuvieron que votar y que no le vuelvan a llamar. Si esto pasa, las encuestas están dando una repetición de resultados. Pues tampoco habrá que fijarse mucho de ellos.

Hoy se constituye la junta electoral, y adelante con los faroles y ya vamos viendo como van las cosas”.