COPE
Miquel Porta Perales, autor del libro 'Totalismo', ha explicado en 'Herrera en COPE' el significado de este término, jun 'neologismo' que creó el psiquiatra neoyorkino Robert Jay Lifton que estudió el comportamiento de los prisioneros de la guerra de Corea y de los súbditos que lograron huir de la república popular China".
Afirma Porta Perales que este término nada tiene “nada que ver con el totalitarismo”. “Es un método de reforma del pensamiento, adoctrinamiento, persuasión, manipulación, colonización de la conciencia y encuadramiento. Su objeto es controlar a la carta la concepción del mundo, el pensamiento, la ideología y la acción de los individuos”.
El totalismo "promete lo que quiere a bajo precio; la felicidad, el éxito, la paz perpetua, se venden emociones, sentimientos, un estilo de vida, pérdida de peso, utopía y la reconstrucción nacional de Cataluña. Hay que incluirlo dentro de este movimiento preocupante que es la pandemia de la credulidad. Expresión del totalismo es por ejemplo el 'coaching'. Los libros de autoayuda, señala también “son pura retorica, un cuento de hadas”.
El ensayista y columnista ha criticado a “los occidentales con baja autoestima” que han instaurado el “piensan por mi, luego existo”.
Porta Perales apunta que algunas personas en “Cataluña quieren recuperar un pasado que no existió”. Considera que en esa autonomía funciona una “espiral del silencio”, el "no expresar en público las opiniones por temor a ir a contracorriente y sus consecuencias"
Resalta que incluso en las encuestas que realiza el Centro de Estudios de Opinión, dependiente de la Generalitat, “gana por poco el no al independentismo”. “Cataluña cree que tiene derecho a todo por ser lo que es. Es un totalitarismo identitario y pretencioso” concluye.
Por último ha criticado el 'buenismo' que “introdujo Zapatero en España”, un “pensamiento flácido” cuyo origen está en el casi inexistente socialismo de los EE.UU. y que “utiliza la comprensión como estrategia”. Se ha mostrado especialmente contario con la idea del “diálogo sin fin” que defiende este movimiento. “El dialogo tiene una serie de límites legales en la democracia. La paz no puede obtenerse a cualquier precio”, asevera.
Totalismo: ese no pensar lo que uno piensa cuando va a contracorriente de lo publicado y publicitado; ese no significarse por miedo a lo que puedan pensar los otros o por temor a poner en peligro los intereses particulares, sociales o profesionales; el mimetismo de las masas y el oportunismo de quien sube al carro del caballo que cree ganador?
Así se constituye una opinión totalista que condiciona, que presiona y abruma, que favorece la autocensura, que da carta de naturaleza a determinadas ideas inconsistentes y socialmente discutibles.