Analiza Carlos Herrera las manifestaciones del 8-M y la ruptura del Gobierno de coalición

COPE

Señoras, señores, me alegro. ¡Buenos días!

Ya es jueves, es 9 de marzo y son las 8 de la mañana, las 7 en Canarias. Hace falta paraguas en buena parte de España, felizmente. Aunque las temperaturas suben, suben incluso más arriba de lo normal o de lo que correspondería con estas épocas. Nos hemos cargado ya un tercio, o estamos a punto de hacerlo, un tercio del tercer mes que cuando finalice pues habrá sido una cuarta parte ya del 2023. No, no quiero decirle nada.

Adiós al 8-M

Ya pasó el 8M, que es lo mejor que podía haber pasado, que pasara. Y sobre todo es lo mejor que le podía haber pasado este Gobierno tan peculiar que tenemos en España. Y quizá lo que esta mañana habría que retratar sería el paisaje después de la batalla, por eso es un día de resaca, de cierta resaca informativa después de la zapatiesta organizada por el Gobierno contra sí mismo, una parte del gobierno contra otro. ¿Puede un gobierno de un país, medianamente serio, importante o trascendente, vivir en su seno una pelea a navajazos a cuenta de desgraciadas leyes o de otras iniciativas con acusaciones de sal gorda como: banda de fascistas o.. .?, ¿puede un gobierno de coalición de un partido, de un país como España vivir así? , ¿es una falta o no es una falta de respeto a la ciudadanía?, ¿es una falta de respeto a las posibilidades del país en el futuro?

Bueno, pues hoy toca recoger los pedazos de la vajilla, lamerse las heridas hace recuento de los daños porque ayer resultó tan dividida la manifestación, la expresión en la calle, que como fue por ejemplo la sesión parlamentaria de esta semana.

Portaban pancartas, cantaban eslóganes, cancioncitas de adolescentes, o las que claramente reivindicaban el feminismo histórico que ha traído hasta aquí las reivindicaciones de la mujer uno piensa: ¿de verdad son pocas o muchas las mujeres que no se identifican con ninguna de estas bandas?, ¿o que siendo y abrazando en su seno las innegables reclamaciones del feminismo clásico no ven en todas las vociferantes el espejo necesario en el que identificarse? Son preguntas retóricas.

Las marchas fueron las menos concurridas desde la llegada al Gobierno de la coalición, la oficial en algunas épocas llego a congregar 350.000 personas, que ayer apenas reunión 17.000. Y allí estaban por separado las ministras del PSOE y las de Podemos, fingiendo además un entusiasmo que no se cree nadie después de lo visto esta semana. Y también estuvieron hasta que los expulsaron un grupo de jóvenes el PP con una pancarta aludiendo al Tito Berni y.. bueno les expulsaron pero lograron la foto. Y además de esta manifestación oficial con cabeceras divididas entre PSOE y Podemos hubo una convocada por el Movimiento Feminista de Madrid contrario a la legislación Trans y a la ley del si es si, el feminismo del Antiguo Testamento para entendernos el de toda la vida, que logró la asistencia de 10.000 personas lo que indica el nivel de fractura que hay en ese movimiento.

Les decía, el movimiento feminista de ahora es más difícil de explicar que la realidad Palestina, vengo diciéndole toda la mañana: que si la OLP, que si Hamas, Frente Popular para la diversidad… Si usted es capaz de ponerme cada uno de eso en un mapa, decirme más o menos por dónde andan, qué influencias tienen y cómo se llevan de mal con los demás… pues yo le doy un abrazo. Que eso es más difícil que todas las cosas de la vida. Con el feminismo empieza a pasar algo parecido.

El enfrentamiento de Irene Montero con unas jóvenes

Tenemos al feminismo completamente roto y desorientado. Ayer había un acto oficial en el Ministerio de Igualdad en el queIrene Montero se enfrentó a la protesta de un grupo de jóvenes feministas contrarias a la legislación Trans. Y la gran pregunta que le hizo una de esas chicas y que Montero no supo contestar era: ¿qué es una mujer? Montero soltó un rollo sobre los Derechos Humanos y todas las cosas…

Pero miren, ni la cosa tampoco está clara porque para los del Partido Animalista las respuestas es que una mujer es igual que una vaca. Ellos animaron ayer a celebrar el 8-M sin distinción de especies.

A estos niveles de despropósitos estamos llegando, por eso les digo ¿son todas las mujeres las que se identifican con este feminismo?, ¿cuántas mujeres hay en España que no quieren saber nada absolutamente de todo esto?

Sánchez es el culpable

Sánchez que ayer nos largó otro vídeo de té con pastas, en Moncloa, esta vez con el cameo estelar de su señora y con alguna fraseología fantástica; ha dado la orden de rebajar la tensión con Podemos y entonces harán lo posible para que esto no sea una olla hirviendo permanentemente.

Pero que se prepare Irene Montero porque el líder feminista va a obsequiarla con todo tipo de humillaciones, seguirá en el Gobierno pero el ninguneo va a ser terrible, le van a hacer el vacío, bueno ya se lo están haciendo en público y en privado. Sánchez le va a arrebatar cualquier iniciativa que considera positiva para su imagen, le prohibió presentar la Ley de Paridad y ayer no acudió al acto del Ministerio.

Y tampoco Yolanda Díaz sale muy bien parada porque su liderazgo se ha demostrado nulo en todo este episodio, no ha podido evitar el enfrentamiento y además se ha escondido, ha votado con Podemos a regañadientes.

Ver cómo la izquierda se saca los higadillos es una cosa que podría ser muy divertido, pero es que lo hace a cuenta del sueldo y le pagamos todos. Este espectáculo nos está saliendo carísimo a todos los españoles y el único responsable es el súper importante, el súper importante, súper importante Pedro Sánchez.

Sánchez es el responsable de haber convertido a una secta de enajenadas miembros del Gobierno. Sánchez es el responsable de permitirle sacar adelante leyes delirantes en lo conceptual chapuceras en lo material. El responsable de esos más de 700 violadores beneficiados y es el responsable de no haber cambiado todavía la ley para poner fin al despropósito.

Porque ha pasado el 8 de marzo y la Ley sigue ahí todavía y ya veremos cómo acaba la tramitación de la reforma.