COPE

Tamara Rojo piensa que tras esta crisis del coronavirus “no todo vaya a cambiar” ya que el “ser humano suele volver a los mismos hábitos”.

Una de nuestras grandes y reconocidas bailarinas, directora artística del English National Ballet de Londres y asesora del Gobierno del Reino Unido para la reactivación del mundo de las Artes tras la pandemia, lo que considera una “gran responsabilidad y un gran honor porque hay mucha gente en este país que viven de las Artes”, dice Tamara Rojo.

Tras estos largos meses de lucha contra el coronavirus en los que ha cambiado por completo nuestras vidas, nos estamos preparando para volver a la normalidad, poco a poco. Y dice Tamara Rojo en ‘Herrera en COPE’ que “no estoy tan segura de que todo vaya a cambiar. La Humanidad ha pasado por muchas cosas y suele volver a los mismo hábitos porque somos seres humanos. Y si hay una cosa que los seres humanos han hecho siempre es congregarse ya sea para seguir una Fe, para ver una obra de teatro y entender su realidad, historia, pasado y comprender su situación…” Asegura además estar convencida de que “va a seguir ocurriendo y soy positiva cuando digo que se va a buscar una solución a esta enfermedad, pero incluso si no se llega a encontrar esa solución a la enfermedad, los seres humanos van a querer retornar a tener contacto y a compartir y a ser parte de algo comunal porque es nuestra esencia”.

Con ese positivismo nos cuenta cómo está trabajando el Gobierno británico para la reapertura de los teatros y demás espacios dedicados a las Artes, “hay varios pasos dentro del contexto de las Artes en el Reino Unido: el primero es claridad del Gobierno de cuáles son las circunstancias en la que los teatros van a poder abrir. Y cuando se entienda cuáles son las circunstancias, cuáles son las consecuencias económicas para cada organización y las iniciativas fiscales que el Gobierno tiene que poner para que las industrias creativas, que en este país al año crecen más que otras industrias, puedan volver a ser ese motor de la economía británica que son. Lo que pasa es que la transición es importante que haya las ayudas fiscales apropiadas”.

Y en este aspecto recuerda Rojo el sistema de financiación de los espectáculos en aquel país, “el 30% es subvención del Estado, el 40% es la taquilla, y otro 30% en filantropía y sponsors. Casi todas las organizaciones que reciben dinero público no reciben grandes porcentajes y por eso precisamente es por lo que hemos sido más vulnerables”.

“El Reino Unido tiene un buen balance entre el sistema europeo que es estatal y el sistema americano que es privado y ha encontrado ese equilibrio que hagce que las compañías o los teatros tengan suficiente seguridad para poder ser creativos”, añade Tamara.

La directora artística del English National Ballet de Londres ha recordado cómo ha vivido el "Brexit" en un país en el que lleva viviendo 25 años, “ha sido emocionante, siempre he pensado que este país atraía lo mejor del mundo entero y lo valoraba, el hecho de que yo sea asesora de la Compañía Nacional es prueba de que en Inglaterrra se dan oportunidades a las personas vengan de donde vengan. Pero aun así, ha sido un momento duro y se han dicho cosas que para aquellos que somos inmigrantes te duelen, pero también es como todo, hay que intentar ver las dos partes y entender qué es lo que ha llevado a esas personas a tomar esa decisión y hay que comprender sus razones también”.

Por último, Tamara Rojo ha ensalzado las virtudes del ballet “que ha sido importantísimo en cada momento histórico, desde convertirse a algo que era relevante solo para la realeza y solo era aspiracional, a ser la bandera de una revolución como la evolución soviética o cubana, a ser la bandera de las Artes Escénicas más creativa, más rompedora”

“Lo que tiene el ballet es que absorbe a las otras Artes por lo que puede estar en la cúspide de la creatividad, absorbe arquitectura porque trabaja dentro de teatros, diseño, música, al ser ese amalgama de lo mejor puede estar en la cúspide”.

“Sí puede ser entendido por todos es porque en su esencia es expresión emocional, lo que pasa es que para que sea eso así el artista también tiene que querer que sea entendido por todo. Es responsabilidad del artista asegurarse que ese arte que puede ser tan refinado que a veces es difícil de entender se le quitan esas capas de barniz para que el espectador entiendan la emoción que esos pasos tratan de dar”, concluye Rojo