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Carlos Herrera  

 

COPE

La madre del pequeño Gabriel, ha vuelto a pedir un pacto ético para "que no se pueda poner en duda lo que de verdad ocurrió"

Patricia Ramírez ha querido romper su silencio en 'Herrera en COPE', ha querido que se oiga su voz, pese a que no le gusta salir en los medios de comunicación para que por fin se haga justicia y se eviten los juicios paralelos a los que se están viendo sometidos, tanto ella como su exmarido, "por algunos programas televisivos que están poniendo como víctima a la asesina de Gabriel, a Ana Julia Quezada, aseguran que la insultó, pero fue ella la que se ensañó con mi hijo".

"No sería justo que después de destrozar a mi hijo y no voy a hablar de cómo nos ha dejado a nosotros, porque, aunque se dice que se nos protege a las víctimas, no es así, yo estoy pagado la asistencia psicológica y a nuestros abogados porque no tenemos respaldo judicial ni herramientas que nos ayuden, yo sigo de baja" dice Patricia Ramírez que pide con la voz rota un pacto ético para evitar estos juicios paralelos. "Aunque me lo hayan quitado, sigo siendo madre y tengo que defender la memoria de mi hijo, pero, sobre todo, una vez descubierto quién es esta mujer, por justicia, que no vuelva a hacer daño a nadie".

"Necesitamos un pacto ético, porque si no esto no va a acabar nunca, necesitamos justicia porque si no esto no va a acabar nunca, te agradezco (Carlos) que me hayas dado voz. Tenemos el apoyo de muchas, de miles de personas, instituciones, las más importantes asociaciones de jueces y todos los que estáis apoyando este pacto" insiste Patricia, un pacto necesario después de que "se ha puesto en duda un juicio que no debería ponerse en duda, por culpa de programas televisivos y a través del caso de mi hijo se han llenado horas y horas de programación con un carácter más de espectáculo que de información".

Patricia Ramírez nunca habría querido que toda España la conociera, nunca ha querido ni quiere salir y hablar en un medio de comunicación y menos por lo que es una persona pública, por el asesinato de su pequeño Gabriel. Después de dos años y un juicio que soporto con "un dolor insoportable", este 12 de diciembre en los micrófonos de COPE ha asegurado que "me encuentro desde el punto de vista judicial con mucho miedo a tener que enfrentarnos de nuevo a un procedimiento después de estos dos años han sido de un dolor incalculable y además del miedo me encuentro con la necesidad de salir a hablar y romper el silencio de todo este tiempo para pedir que haya una sentencia firme que no se pueda poner en duda y que esta mujer no pueda salir nunca más" porque aunque Ana Julia Quezada ha sido condenada a cadena perpetua revisable, la primera mujer condenada en España a esta pena, sus abogados han pedido que se repita el juicio.

Ante la petición de la defensa de la asesina de Gabriel de que se revise el juicio para evitar que Ana Julia pase el resto de su vida en la cárcel, la madre de Gabriel quiere dejar claro que "nos hemos visto abocados a pedir el juicio nuevo, a que se repita solo si no se tienen en cuenta unas pruebas periciales que determinarían que los informes que hicieron los forenses del juzgado contienen alguna irregularidades porque reconocen las lesiones, pero no las unen como las sufrió Gabriel. No me gusta hablar de cómo murió mi hijo, pero en este caso es necesario para evitar que se retire la prisión permanente revisable y para conseguir que esta mujer no vuelva a salir nunca más y aunque nos esté costando la vida tenemos que salir a hablar".

"Existen pruebas suficientes para determinar que no fue un golpe, no fue que ella lo asfixió y nada más. Hay lesiones que necesitan entre 30 o 40 minutos para producirse, que necesitan un tiempo para producirse que no necesitan sangrado, que Gabriel presenta y que determinan que no murió inmediatamente, sino que lo pasó mal", dice con la voz entrecortada Patricia Ramírez que pese a "no quiero hablar de esto, queremos que se estudie esas periciales que darían lugar a que ella se ensañó con mi hijo y lo probarían y si no se estiman esas pruebas que nos digan científicamente por qué".

Explica Patricia que "el estudio de nuestros forenses no se tuvo en cuenta, se echó hacia un lado porque se estimó que el estudio de los forenses habían visto a mi hijo fallecido, pero a mi hijo se le hicieron fotos y se determinó que no se vio una manchas de golpes detrás de la cabeza que no se vieron y que establecen que Gabriel se defendió mientras ella le intentaba asfixiar. Nunca quise ver las pruebas forenses porque me producía un gran dolor, un dolor extraordinario y fui la primera sorprendida al ver en el juicio que no se tenían en cuenta y no nos dijeron por qué y nos sorprende sobre todo que lo digan médicos que están obligados a salvar vida. Me he visto obligada a ver esas pruebas y la muerte de mi hijo no fue inmediata, desgraciadamente".

Pero, un nuevo juicio te obligaría a pasar muy malos ratos, Patricia, le ha dicho Carlos Herrera a la madre de Gabriel, un juicio que volvería a ser mediatizado, "desde el principio sabíamos que la defensa iba a apelar el juicio. Nuestra parte jamás ha salido públicamente, solo mi letrada una vez cuando se cerró la instrucción, pero la parte contraria sí ha salido en programas, que ahora critica y se basa para apelar. Ha habido una mediatización del caso, pero siempre le ha favorecido a ella porque se la presenta como una víctima, dice que mi hijo la insulta y ella se defiende y se dicen una serie de cosas que minimizan como mató a mi hijo, y no fue así, ella se ensañó y ahora está en tela de juicio y es muy importante que se sepa que pasó para que esta mujer no salga nunca más".

Los padres de Gabriel quieren evitar que Ana Julia Quezada esté en la calle en 15 años, "no queremos meterla más años injustamente, es lo que pasó, no queremos ser injustos, queremos que se haga justicia a mi hijo. No sería justo para una mujer que no solo ha hecho a mi hijo lo que le ha hecho, que ha sido muy duro, sino que lo destrozó, se revise la prisión permanente. No soportaría un juicio nuevo, queremos que se estimen las periciales y se estimen como ensañamiento y que tengan en cuenta por sensibilidad que nosotros también tenemos derecho a saber que pasó y solucionar esto".

Sobre el cambio de prisión de Ana Julia Quezada a la cárcel de mujeres de Brieva en Ávila, Patricia asegura que " ahora mismo como no hay más pena posible porque tiene la pena permanente revisable sí posibilitaba este cambio de prisión, pero no sabemos si es un premio o un castigo, no entendemos nada, no entendemos como la propia Fiscalía ha impugnado los delitos contra la integridad moral para quitarles años, delitos probados y que fueron considerados por unanimidad por el jurado. Más las secuelas que nos han dejado a su padre y a mí. Nos machacó y esto es integridad moral, mi integridad, mi dignidad y mis derechos los puso al pie de toda la sociedad y el dolor esos doce días fue incalculable" dice entre lágrimas.

Reitera Patricia Ramírez que "aunque me lo hayan quitado, sigo siendo madre y tengo que defender la memoria de mi hijo, pero, sobre todo, una vez descubierto quién es esta mujer, por justicia, que no vuelva a hacer daño a nadie" y ha dejado al final de la entrevista un deseo y una esperanza " que todo termine y podamos empezar a respirar".