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Carlos Herrera  

 

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Mari Pau Domínguez acaba de publicar una nueva novela, “La nostalgia del limonero”, que es fruto de una historia real que ha tenido que ficcionar en parte para que no fuera tan dolorosa. Es la historia de sus padres y la emigración de andaluces a Cataluña.

Ya en 2016 se atrevió a publicar algunas historias en la Tercera de ABC. En esos artículos denunciaba que los andaluces, murcianos, etcétera, que habían escapado de la pobreza, habían acabado sintiéndose catalanes. Pero en Cataluña han terminado negándoles esas raíces.

Mari Pau escribe como una manera de contestar a Oriol Junqueras cuando dijo que la independencia era algo muy sentimental. Y Mari Pau pensó: “Si se trata de hablar de sentimientos, yo te voy a hablar de esta historia, a ver qué te produce”.

COMPRAR EL LIBROUna novela «auténtica» y con aroma de nostalgia en la que muchos nos reconoceremos.

En las páginas de esta novela al lector le parecerá que se reencuentra con viejos conocidos, casi parientes muy cercanos cuya historia no sólo merece sino que conviene recordar: sus protagonistas son Concha, andaluza emigrada a Cataluña en los años 60, y su hija Paz.

Tras un traumático divorcio que la deja prácticamente en la ruina, económica y también emocional al comprobar que su matrimonio había sido una farsa, Paz regresa a la antigua casa familiar, un lugar del que se fue para no volver. Estaba harta de ser «la catalana» durante los veranos en el pueblo de Sevilla de donde proceden y «la andaluza», el resto del año en su barrio de Barcelona. Vuelve con muchas cuentas pendientes y una amarga sensación de fracaso que cuadra muy bien con la crisis social y política del país.

Paz nunca ha conocido los detalles de la historia de su madre, Concha, una mujer llena de energía y pasión, que va plantando cara a los reveses que se le van presentando: la decepción de su matrimonio, las terribles riadas del 1962, la dureza de los primeros años en Cataluña, la imposibilidad de realizarse a través de una historia de amor en la madurez, y la distancia cada vez mayor con su única hija, en la que proyecta todas sus ilusiones.