noticia
 
 
Carlos Herrera  

El reencuentro entre Carlos Herrera y Uxío Xil 

COPE

Mandó unas cintas hace 25 años que suenan ahora en Herrera en COPE

Nació en Salceda de Caselas hace 77 años, pero con 18 años se fue a Vigo a trabajar en un taller de motos. Aunque lo suyo era moverse en bicicleta. A Uxío Xil le llamaban el Rey de las bicicletas, porque tuvo suerte de coincidir con algunos grandes, pero eso fue antes de convertirse en el rey de los chistes malos.

De hecho algunos de los más malos, se los mandó a Pepe Domingo Castaño hace casi 25 años... los grabó con una máquina que aún conserva. No hubo respuesta, por lo que dio por hecho que habrían metido aquella cinta en una trituradora y así, cayó en el olvido.

Pero la vida te lo devuelve todo, y hace unas semanas su hermano escuchaba sus chistes a través de la voz de Carlos Herrera. No se lo podía creer. Aquellas cintas habían caído en sus manos un cuarto de siglo después. Le buscamos, le encontramos, vino a pasar un rato agradable y nos hemos reído mucho. Aunque ya no cuenta chistes, pero sí escribe poesía.

Espera que un día pueda publicar sus poemas, y donar los beneficios a una buena causa. Puede que Uxío Xil, cuente chistes malos, pero este ratito de radio, se ha parecido mucho más a un cuento con moraleja.

 

FARO DE VIGO

Uxío Xil, el humorista que cautivó a Carlos Herrera

La rocambolesca historia de una casete de chistes que el vigués envió a Pepe Domingo Castaño y que el periodista de la Cope emite en su programa

Los oyentes de Carlos Herrera hace tiempo que conocen los chistes de Xil, "el rey de las bicicletas", de Vigo. El periodista de la Cope, uno de los más escuchados de la radio matinal en España, suele emitir cada mañana uno de los chistes de este personaje gallego que ha permanecido envuelto en el misterio para sus cientos de miles de oyentes. Hasta ahora.

Herrera se preguntaba en alto quién era el autor de estos chistes, decenas de ellos, grabados en una vieja casete que cayó en sus manos. Se trata de chistes tan desconcertantes como graciosos. Y es que al comunicador de origen andaluz le han gustado siempre los chistes malos, que si son breves, son dos dos veces buenos. De hecho, sostiene la teoría de que los mejores chistes son los que duran menos de diez segundos.

El caso es que el destinatario original de la cinta fue el periodista gallego Pepe Domingo Castaño, entonces en la SER, y a quien Uxío Xil envió la cinta hace nada menos que un cuarto de siglo. "En 1994 le envié una cinta a Pepe Domingo Castaño, con Xil en letras grandes -relata el humorista, de 76 años, a FARO-. Como don Pepe Domingo es gallego me caía bien, pero nunca supe más nada... Pensé que habían metido la cinta en una máquina trituradora".

Pasaron los años y hace unas semanas un hermano de Uxío escuchó un chiste en la Cope y lo llamó, emocionado, entre sollozos: "¡Están poniendo tus chistes en la radio!". "Pensé que estaba de broma. Luego me lo dijeron otros muchos y me lo tuve que creer", dice Xil, que llevaba retirado del humor casi dos décadas.

"La cinta se la dio don Pepe [Domingo Castaño] a don Carlos Herrera. ¿Cómo pudo ser eso? ¿Cómo guardaron esa cinta? No sé la explicación, es increíble", cuenta conmovido Uxío Xil, nacido en Salceda de Caselas pero afincado desde hace mucho tiempo en Vigo."Me van a llamar a Madrid porque Herrera dijo una vez por la radio que a lo mejor yo ya no vivía".

Pero "el rey de las bicicletas", con 76 años y un cerebro aún ágil, está vivo. Fue ciclista cuando empezaba Álvaro Pino, según cuenta; corrió con los míticos atletas vigueses Carlos Pérez y Javier Álvarez Salgado, y José Luis Blanco Campaña lo llevó a la Televisión de Galicia. Este vecino de A Guía, que trabajó con Secundino Ponte en un taller mecánico de motocicletas de Sanjurjo Badía, posee, además de chistes, una colección de "pensamientos" poéticos. Los tiene dedicados a Álvaro Cunqueiro, Rosalía, Castelao y Víctor Freixanes, al que quiere ofrecerle su obra para que la edite con un fin benéfico.

Asegura que fue el mítico Xan das Canicas, cuando trabajaba en "La Voz de Vigo", el primero que vio su talento. "¡Ese me metió el vicio en el cuerpo!", recuerda. "Me dijo: Lo tuyo no son poemas, son pensamientos poéticos. Tienes una vena que no tiene cualquiera. Tienes algo que... no sé cómo decírtelo". Nosotros tampoco, pero sin duda tiene algo.