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Carlos Herrera  

 

COPE

Rota de dolor, Patricia ha asegurado que Gabriel conocía "perfectamente la zona" y que no es un niño travieso

Patricia, la madre del niño de ocho años desaparecido el martes en Níjar (Almería), ha asegurado que no saben qué le ha podido pasar al niño. "No sabemos qué ha podido pasar. Podría haberse caído o... no sé", ha dicho en su intervención en 'Herrera en COPE'.

Rota de dolor y llorando, Patricia ha asegurado que Gabriel Cruz Ramírez conocía "perfectamente la zona" y que no es un niño proclive a las travesuras. "Vivimos en un sitio pequeño, donde todos nos conocemos. La zona no la transita mucha gente y él no tiene malicia ni es pícarlo. Es muy inteligente, muy bueno y obediente. Es un niño muy lindo". 

El pequeño se perdió entre las localidades nijareñas de Las Hortichuelas y Las Negras cuando iba a casa de un amigo, que estaba solo a unos cien metros de la de su abuela. Según su madre, Gabriel vestía en el momento de su desaparición un pantalón negro con rayas blancas de Adidas y una chaqueta roja con capucha. "Es delgado, muy sonriente, con ojos muy abiertos. Su cara lo dice todo. Si alguien lo ve, sabe que es él", ha dicho la madre muy emocionada.

62 miembros de la Guardia Civil, Policía Local y Protección Civil, entre otros, además de 150 vecinos voluntarios están buscándole desde el martes por la noche, cuando se dio la voz de alarma. Un helicóptero y varios drones refuerzan la búsqueda. "Están buscando por todas partes. Amigos nuestros han venido de Madrid y Barcelona para ayudarnos. Con la esperanza de encontrarlo en algún sitio. Sé que se está haciendo todo lo que puede", ha señalado Patricia.

Más tarde, la madre se ha dirigido a quien haya podido llevarse al niño para decirle que no habrá "represalias" por parte de la familia, por lo que lo único que tiene que hacer es "montarlo en un coche y dejarlo en un centro comercial, en la vía pública, donde puedan". Ha agradecido todas las llamadas, pero ha pedido que se "libere el teléfono" de no tener información esencial para el caso porque "lo único que pueden hacer es entorpecer la investigación".

Un familiar de los padres ha señalado que sobre las tres y veinte de la tarde del martes vio una furgoneta de color blanco que le pareció "rara" en las inmediaciones del camino que usó el niño y otra vecina, Consuelo, apunta que a esa hora escuchó un "portazo" en la zona.