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Carlos Herrera  

 

COPE

En Gerona, el feudo catalán del independentismo, se encuentra Vila-roja, un barrio que se ha declarado abiertamente territorio español. En él viven trabajadores que durante algunos años se han sentido catalanes de segunda. Su planteamiento es sencillo: Si Cataluña se cree con la potestad de declararse independiente, Vila-roja también puede ser independiente de esa independencia y ser española. Y para ello hacen gala con decenas de banderas españolas que cualgan de fachadas, calles y ventanas del municipio. 

"No se nos respeta es en Gerona capital"

La entrada del pueblo ya es una declaración de principios. De lado a lado del camino hay una bandera que reza 'Bienvenidos a España”. Santi López es uno de sus vecinos y promotores de la idea. “Somos trabajadores, muchos con abuelos y padres emigrantes de Andalucía, un barrio normal. No somos como dicen por Gerona un barrio facha o franquista y separatista de los catalanes. Ellos van con la estelada que no es legal y nosotros llevamos la española, que es la que nos reconoce”, ha explicado este vecino en 'Herrera en COPE'.

"Nos sentimos catalanes pero sobre todo españoles"

En esta pedanía ya los vecinos quitaron las urnas de un colegio durante el referéndum ilegal del 1 de octubre. “Nos sentimos catalanes pero sobre todo españoles”, afirma Santi.

En estos momentos en el barrio no hay ninguna bandera estelada pero no por imposición, aclara, “no quieren, aquí cada uno se expresa libremente. Los independentistas son minoría pero se les respeta igual que ellos nos respetan a nosotros. Donde no se nos respeta es en Gerona capital. No se puede juzgar a un barrio sino se ha vivido en él”.

Uno de sus 'ilustres' visitantes ha sido el ex presidente de la Generalidad, Carles Puigdemont. “Estuvo en una fiesta del barrio bailando sevillanas y rumbas y ahora mira por donde sale", bromea Santi López quien ha aclarado que entonces "aún no estaba la pancarta de bienvenidos a España".