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Carlos Herrera  

 

COPE

El exministro Josep Borrell, autor del libro 'Los idus de octubre' ha puesto sobre la mesa los 'problemas” de la socialdemocracia. “Era una ideología que tenía el 40 % del voto en todos los países europeos y ahora tiene el 20%, en el mejor de los casos”. “Es un problema profundo relacionado con una sociedad que ha cambiado y con la aparición de otras formas de representación políticas”, ha explicado en 'Herrera en COPE'.

En referencia al último barómetro del CIS, que refleja una subida de 1,3 puntos para el PSOE, lo que evita el 'sorpaso' y convierte a esta formación en la segunda fuerza ante la bajada de 2 puntos de Unidos Podemos y sus confluencias, Borrell ha dejado claro que "esas variaciones, de muy escasa cuantía en un contexto de enorme incertidumbre, son difíciles de interpretar”.

"Los socialistas no nos hemos dicho la verdad, hemos apoyado decisiones en el comité Federal en las que no creíamos"

Josep Borrell, ha defendido que Pedro Sánchez, uno de los tres candidatos a la Secretaría General del PSOE, “no es el peligroso radical izquierdista que se nos ha pretendido presentar”. Considera que, al igual que el candidato socialista a las presidenciales en Francia, Benoît Hamon, ha puesto sobre la mesa debates de fondo como la transición energética, la lucha contra el cambio climático, la digitalización de la economía o las nuevas formas de distribución de la renta. Eso no es ser izquierdista, sino anticiparse a unos problemas que nos vienen encima”, ha zanjado.

Respecto a los avales que han conseguido los tres candidatos socialistas, recuerda que al candidato francés, Hamon, que tan malos resultados obtuvo, “no lo eligió la militancia” sino los simpatizantes y asegura que “avalar no es votar”. "El aval es público y el voto secreto", ha señalado.

La socialdemocracia europea pierde apoyo electoral, sufre una hemorragia militante, discrepancias ideológicas y divisiones internas. Esa crisis no se puede comprender a golpe de titulares o de frases huecas. Y menos aún la del PSOE que, después de facilitar una investidura sin contrapartidas del Gobierno del PP, atraviesa una grave situación.

En este ensayo, Josep Borrell ofrece una detallada reflexión sobre un tema que conoce bien gracias a su formación académica y amplia trayectoria política. Combina el rigor de los datos y la precisión de la crónica con una sinceridad que le lleva a admitir que su partido “ha sufrido un gran fracaso colectivo como consecuencia de que los socialistas ‘no se han dicho la verdad’ con respecto a sus ambiciones personales y sus actitudes ante la formación de Gobierno”.

La gravedad de los hechos ocurridos desde el Comité Federal del 1 de octubre del 2016 le lleva a equipararlo con los idus de marzo, cuando el asesinato del César sumió al Imperio romano en largas guerras civiles. Y desmonta las razones supuestamente patrióticas que, en la perspectiva de la cuestión catalana, se usaron para justificar la ofensiva contra la Ejecutiva de Pedro Sánchez.

Analiza las disyuntivas a las que se enfrenta el PSOE desde el punto de vista del modelo de partido —más participativo y menos oligárquico—, del modelo de Estado en la perspectiva federal, en su capacidad de socializar la política y en su política de alianzas. Considera que la solución que se dé a la crisis tendrá consecuencias, no solo para el PSOE, sino para el futuro del país.

Porque lo que está en juego es la elección entre dos modelos de partido y entre dos concepciones sobre cómo la socialdemocracia declinante puede reconquistar una mayoría social en sociedades que sufren el contrachoque de la globalización.