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Carlos Herrera  

 

COPE

La dirigente socialista se enfrenta al dilema de continuar al frente de la Junta de Andalucía o aspirar a la secretaría general del PSOE.

 

 

"Señoras, señores, me alegro, buenos días....

 

Esta mañana vamos a hablar de muchas cosas. Algunas tienen que ver con cuestiones judiciales, como la pantomima que ayer el señor Homs quería representar frente al Supremo, en la que venía a decir que él no sabía, "cómo voy a saber yo lo que significaba aquella providencia del Tribunal Constitucional". Hombre, los que no hemos estudiado derecho sabemos la diferencia entre una sentencia, un auto y una providencia, que lo que hace es prodecer a trámites, comunicar, poner en conocimiento de partes alguna decisión judicial -y la decisión judicial del Constitucional era que no se podía celebrar el 9 de noviembre-, cuánto más tendría que saberlo él que, según parece, estudió Derecho. Ayer quería hacerse el tonto, para lo cual tiene una cierta soltura o destreza. Pero pretendía que los tontos éramos los demás. Además ha tenido la mala suerte de dar con un presidente de la Sala, como es el juez Manuel Marchena, que es un tipo de una pieza y que no le va consentir ni una.

Hoy, Día de Andalucía, veníamos realizando esta mañana diversas reflexiones acerca de este 28 de febrero y lo que significó el 28 de febrero de 1980, en el que algunos de ustedes podía estar allí. Ustedes sabía que España estaba diseñada después de la dictadura de Franco para ser un Estado en el que hubiera tres patas elementales, o tres nacionalidades históricas con estatutos de cara y ojos, y el resto regiones administrativas con más o menos solvencia. Y eso lo dinamitó Andalucía, pero desde el espíritu ciudadano, se hizo desde la ciudadanía y los andaluces que estaban en ese momento, recuerdan que 1980, a pesar dee lo enrevesado de una pregunta imposible, a pesar de otras cosas, el espíritu de la autonomía rompió aquel esquema y Andalucía se incorporó a las cuatro con cara y ojos. Después llegó el café para todos. 

Después Andalucía, en el año 2007 reformó el estatuto, pero ya fue un estatuto que no venía de abajo arriba, venía de arriba abajo, era un estatuto de políticos, con lenguaje de políticos cursis, y con la pretensión de afianzar en lo que se ha convertido la autonomía de Andalucía, en la burocracia. Hoy hay varios artículos acerca de ello muy interesantes. El del maestro Burgo, Antonio Burgos, en el que dice que no se sabe si lo que celebramos es el Día de Andalucía o el Día de la Junta Andalucía, que es lo que parece, el día de la burocracia por excelencia. Cuando hay tantas cosas que celebrar en Andalucía, pero tantísimas otras que reclamar. Hombre, felizmente, que por ejemplo dice Carlos Colón en su columna del Diario de Sevilla, se descartó de entrada el nacionalismo babuchero este andalusí que algunos querían poner en marcha, y el regionalismo andaluz fue siempre leal al Estado, y fue leal a España. En Andalucía no hay ningún tipo de problema para compaginar España, Andalucía, ... En Andalucía existe un nacionalismo mucho peor, que es el nacionalismo municipal, que es el que hace que sean ciudades las que estén enfrentadas entre sí de una manera absolutamente absurda. Pero esa es otra. 

Y en este Día de Andalucía, muchas miradas están puestas en Susana Díaz, por ver si enseña la patita o no, se le ve en el blanco de los ojos que quiere ser candidata a la secretaría general, o no. Y ya hay algunas voces que le recuerdan que puede estar comentiendo un error y que lo mejor es que dé un paso atrás sin haber dado uno adelante. Nadie dice que tenga que dejar de ser presidenta de la Junta para ser secretaria general del PSOE, los estatutos no la obligan a eso, pero sus dos contrincantes, López y Sánchez, ya le están diciendo todos los días que eso lo tiene que hacer así. Y cuidado porque a ver si descuida la joya de la corona que es la Junta de Andalucía, para una no secretaría general que se la puede madrugar Pedro Sánchez a pesar de que, efectivamente, haya muchas voces dentro del PSOE que estén a favor de Susana Díaz. La última que he leído es una entrevista en el Diario de Sevilla de Pepe Rodríguez de la Borbolla -que es un hombre muy querido dentro del PSOE, muy querido en Andalucía, porque una persona que ustedes difícilmente le escucharán decir tonterías-, y cuando le preguntan por Pedro Sánchez -él no se ha caracterizado por ser un susanistas fervoroso- y dice "Pedro Sánchez es un poquito aventurero, un poquito inconsistente, un poquito mentirosillo y un poquito abandonista", pero le quiero mucho, le faltó decir. Y esto es una parte del establishmente del PSOE, pero la militancia  del PSOE, como la militancia de casi todos los partidos, muchas veces se manifiesta en contra de los aparatos de los aparatos. Así que hoy es un buen día para celebrar pero también paran tentarse las ropas por si acaso".