COPE

"Señoras, señores, me alegro, buenos días...

¿Qué nombres propios hay hoy por el mundo? Alguna que otra visión internacional y la noticia de un pacto político en España en el que el PNV y los socialistas vascos han llegado a un acuerdo de reencuentro para gobernar en coalición los próximos cuatro años en la Comunidad Autónoma Vasca.

Pros y contras: Siempre es mejor que el PNV juegue a una moderación, que no se vaya al monte como se iba con Arzallus con cierta facilidad, que no se vaya al monte como se fue en el año 98 cuando firma el Pacto de Estella y eso hace que se deshaga el acuerdo que tenía con el PSE, el de nuestro Nicolás Redondo, para formar un gobierno. Llevaban gobernando tiempo. En este caso, el PSE de Idoia Mendía pacta formar un gobierno en el que veremos qué acuerdos hacen, qué consejerías reparten y qué consejerías tienen los socialistas, que veremos si eso significa que tienen poder político o no tienen poder político. Que el PSE retenga las ambiciones que se desatan en todo nacionalismo épico, como en el caso del PNV, no es malo. Puede ser una enseñanza bastante interesante para otros en otras comunidades.

El PSE de Txiki Benegas en el año 86 gana las elecciones, y las gana porque al PNV le sale un esqueje, que es el de Garaiocoecha y Eusko Alkartasuna, pero no puede pactar con nadie. Txiki Benegas se ponía como una moto cuando le decían que él había cedido el poder a los nacionalistas del PNV. ¡Es que a Txiki no le apoyó ni Bandrés!, que se creía que era más puro, más vasco que él. Txiki Benegas por cierto fue un buen hombre, un hombre decente. Si pactaba con Garaicoechea, Garaicoechea decía que quería ser presidente. Y entre elegir a eso o elegir a Ardanza, eligió a Ardanza y le puso ahí a Ramón Jáuregui, que hizo un trabajo de zapa, constantemente irle cogiendo del pantalón para que no se fuera encaramando a montes que no convencían. Ya veremos si este pacto significa que el PSE se lo va a poner difícil al PNV para que pacte los Presupuestos con el PP. Es un lío, una combinación a varias bandas. Cuando se conozca el programa de gobierno y el reparto de la consejerías hablaremos de esta historia.

Luego hay historias en toda Europa... Las encuestas en Francia decían que el candidato a la derecha iba a ser Nicolás Sarkozy porque el señor Fillon y el señor Juppé... De verdad, yo no creo que los encuestadores y los analistas hayan ahora desaprendido todo lo que saben. Seguramente la gente no dice la verdad, es lo más probable, y es muy difícil detectar cuando un tío dice la verdad o no. El caso es que en Francia, en las primarias de la derecha francesa han convocado a la gente para ver quién es el líder de esa derecha. ¿Qué tiene de interés quién es el líder de esa derecha? Pues que como en Francia todo es a segunda vuelta, en la primera vuelta Marine Le Pen, el populismo, el extremo populismo, va a ganar y se tendrá que enfrentar al que resulte el segundo más votado. Uno de la derecha o uno de la izquierda. Los de Hollande no están desde luego como para tirar cohetes. Y en la derecha, Sarkozy, Juppé y Fillon, que había sido primer ministro de Sarkozy, se enfrentaban. Pues ha votado mucha gente de izquierda. Había que pagar dos euros para votar, porque con eso se financia la campaña electoral. La izquierda ha votado para apoyar al candidato al que luego le resulte menos doloroso votar. Y no era Sarkozy, era Fillon. Así que apuesten a que la segunda vuelta de las presidenciales francesas pueda ser Marine Le Pen y el señor Fillon, al que veremos si le vota toda la izquierda o no. A ver hasta donde llega el extremo populismo en Europa.

Miren, esa puede ser otra de las una de las razones que hacen que Angela Merkel se presente por cuarta vez en Alemania. Puede llegar a batir el récord de Helmut Kohl, que fue su mentor. Hay varias visiones. Hermann Tertsch escribe en ABC que es que se presenta Merkel porque es que no hay otro en ese ámbito. Puede ser. Estoy completamente de acuerdo con el editorial de ABC, que agradece a la señora Merkel las muchas cosas que ha realizado en Europa para frenar los populismos, extremos populismos que están en todo y para todo.

Les aconsejo el editorial de El Correo de Andalucía, un editorial que titula 'Digan lo que digan' hablando del populismo, que ha llegado también ahora a Aragón y Andalucía a decirnos que somos una nación y que tenemos que tener periodosn constituyentes. Escribe Camacho hoy en ABC que no hay ya oración subordinada, todos son mensajes breves, de dos líneas, lo que cabe un tuit. Esta líderesa de Podemos en Andalucía diciendo que nación viene del verbo nacer, y Andalucía de alguna manera es una nación porque nace gente y hay pues costumbres y tradiciones y características... Bueno, pues entonces Ciudad Real es una nación, porque ahí también nace gente, y Cuevas del Almanzora es una nación, también nace gente y también... Todo este pensamiento débil, absurdo, que no dura más de una línea, son incapaces de trazar más de una línea en la verborrea populista, no es exclusivo de España. En Europa es una afloración tan sencilla, tan fascinante, que alguna vez habrá que analizarlo con tranquilidad. Es muy bonito que la palabra nación venga de nacer. Ante discursos como estos, alguien tiene que poner freno a los disparates, alguien con el intelecto medianamente trabajado, algo más que una fraseología. Solamente saben trazar una línea y normalmente de una pobreza argumental que clama al cielo".