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Carlos Herrera  

 

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"Señoras, señores, me alegro, buenos días...

Ayer el Rey hizo su trabajo. Hizo lo que tenía que hacer y dijo lo que tenía que decir. Además lo dijo en un discurso que ha estado preparando de forma minuciosa, cual si fuera un orfebre. Ayer el Rey habló de los elementos básicos fundamentales: que la Política tiene que garantizar el bienestar a los ciudadanos y el respeto a los ciudadanos que representa. Es decir, el habló ayer, en un discurso de veintidós minutos, que los políticos tienen que dignificar la vida pública, tienen que prestigiar las instituciones. Claro, decir eso cuando en los escaños del Congreso había una cantidad de cretinos haciéndose los niñatos, como por otra parte era de esperar, es significativo. Habló de las víctimas del terrorismo, de la solidadridad de la Nación entera.

Y dejó una frase, además de pedir el respeto a la legalidad, que algunos deberían grabársela a fuego: "España no puede negarse a sí misma, no puede renunciar a su propio ser". España es todo aquello que ha traido a España hasta aquí, incluida la aventura política que nació tras la muerte del anterior Jefe del Estado. Así que ya tienen sus señorías tema para madrugar. La inmensa mayoría de la Cámara se levantó y aplaudió durante dos minutos y medio al Rey, como nunca antes había pasado. Es un aplauso más fuerte que el meramente ceremonioso o el educado. Una manera de diferenciarse también de aquellos que creen que son más republicanos por no saludar al Rey. No es que sean más republicanos, son más groseros.

Tampoco pidamos demasiadas cosas, porque además de estos tíos, los de Podemos, ¿qué hacía el PNV no aplaudiendo al Rey? Con las cosas que tiene que agradecer el PNV y la Comunidad Autónoma Vasca a esta Monarquía, que ha amparado una Constitución que les ha permitido vivir con el autogobierno que no han tenido jamás, jamás en su puñetara vida, con instituciones sólidas, con una ventaja respecto al resto de los españoles cual son acuerdos medievales como los cupos y los conciertos económicos particulares. Y con toda la defensa de la simbología, del idioma, de lo que consideren que es representativo de los vascos. ¿Y qué hace el PNV guardándose las manos en los bolsillos como si fueran de Podemos?

Y los de Podemos, toda la ceremonia, la de siempre, la ceremonia del tonto. Tienen el tonto con la bandera republicana, que ese no falla nunca, es que está en todas partes. Y no le dijeron nada, hasta que se cansó de aguantar la banderita. ¿Qué hubiera pasado si un diputado montaraz hubiera exhibido, tal y como este exhibió esa bandera, la bandera del régimen anterior, la bandera de España con el águila de San Juan, el aguilucho que le llaman algunos? ¿A que seguramente sí hubiera sido llamado al orden y le hubieran quitado su bandera? Pues a este no, no le demos importancia. Claro que se le tiene que dar importancia, se le tiene que dar importancia al tonto de la camiseta, ayer había dos: Cañamero, que no falla, porque a este le pones el desfibrilador a todo lo que da y este no se le pasa. Con una camiseta que decía 'Yo no he votado a ningún Rey' que tal y que cual. Pues tú puede que no, tonto, pero los demás sí, porque votamos una Constitución un día 6 de diciembre que fue aprobada por el 87%. Y lo primero que decía que el régimen era una Monarquía Parlamentaria. Vaya si lo han votado. Ahora, si tú crees que hay que votar cada día que un español cumple 18 años...

Luego otra tonta con la camiseta, Vanesa Angustias, de En Marea. En la camiseta ponía "Siempre guerrilleras, nunca bandoleras". Y luego la tonta del tweet, Carolina Bescansa, diciendo "Leticia, lo que le van a decir a tus hijas por traerlas al Congreso". Es que no vale la pena.

Rosa Díez escribía en 'El Español' muy interesante, diciendo que no son originales estos tíos. Esto HB, Herri Batasuna, lo hizo en la Casa de Juntas de Gernika el 4 de febrero del 81. Fue el Rey Juan Carlos, también iba el Príncipe, por cierto, que tenía 10 u 11 años. Y cuando toma la palabra don Juan Carlos, los de Herri Batasuna se ponen allí con el puño en alto a cantar Cara al Sol de ellos. Y son los protoertzainas, todavía no estaba la policía como tal organizada con el nombre de Ertzaina, los que le quitan de enmedio y se produce un gran aplauso. Aquellos tiempo eran muy duros, estaba secuestrardo José María Arrián, el ingeniero de Lemóniz, que luego lo mataron a los dos días. Y a los veinte días vino el golpe de Tejero. No era precisamente un tiempo fácil. Los farsantes de siempre.

Y por lo demás ayer hubo más cosa porque se reorganiza el Ministerio del Interior. Cuando uno llega a un ministerio y quiere dejar claro que no tiene nada que ver con lo que hubo antes, lo cambia todo. Es una forma de mandar un mensaje, que es el que ha enviado Zoido. Francisco Martínez ha sido un extraordinario secretario de Estado de Seguridad. Tiempo habrá para ver si realizan bien su labor o no la realizan bien.

Y tenemos polémica por las palabras de Cristina Cifuentes hablando de los impuestos que cobra en Madrid, que son menos que en otros sitios de España, y recaudan más. Aquello de la curva de laxer... Lo que pasa que no sé de dónde le salió, qué calentón de boca, qué quiso decir con eso de que con lo que se gana en Madrid resulta que a los andaluces se les paga la Educación y la Sanidad. ¡Qué necesidad de ahora sacar el Andalucía nos roba! Andalucía, dondo los impuestos son los más caros del mundo occidental. Aquí te sangran, estos sí que son sacamantencas. El patrimonio, las donaciones, las sucesiones, el IRPF más alto, ... para luego ser en la gestión de las cosas manifiéstamente mejorable. Ahora, eso de Andalucía nos roba qué sentido tiene, en qué papel deja al PP ahora en Andalucía. Una sobrada de esas que no aporta absolutamente nada al diálogo político".

 

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El Rey valora la "generosidad" que ha permitido que por fin haya Gobierno

 

Los Reyes escuchan el Himno Nacional durante la Apertura Solemne de la XII Legislatura

 

 

Solemne Apertura de las Cortes Generales

El Rey ha valorado hoy la "responsabilidad" y "generosidad" que ha permitido después de un año de "inquietud", "desencanto" y "distanciamiento" de los ciudadanos con la vida pública por la falta de Gobierno, que España cuente con un nuevo Ejecutivo elegido por el Congreso.

"Creo que es muy importante subrayar que la crisis de gobernabilidad se ha resuelto, finalmente, con diálogo, responsabilidad y también generosidad", ha destacado en su discurso ante las Cortes en la sesión solemne de apertura de la XII legislatura.

El monarca ha pedido a los parlamentarios el "diálogo y entendimiento" exigible a "cualquier régimen de libertades", un diálogo que, ha advertido, "debe ser sincero y leal" e impulsado por el "espíritu fraternal entre todos los españoles".

Varias han sido las referencias de Felipe VI al diálogo en su alocución en el Congreso, donde ha apuntado que "nuestro pluralismo político requiere de un diálogo permanente y un debate siempre constructivo", el cual reclama que "la generosidad, el respeto y el entendimiento sean valores permanentes en la vida pública".

También ha subrayado que esta actitud demanda "la voluntad y la capacidad de llegar a acuerdos, de lograr la mayor concertación en las cuestiones básicas" y necesita "el compromiso de todos con el interés general para resolver los problemas de los ciudadanos".

Su Majestad también se ha referido a la corrupción, "que ha indignado a la opinión pública en todo nuestro país", pidiendo que siga siendo combatida "con firmeza" para que llegue a ser "un triste recuerdo de una lacra que hemos de vencer y superar".

"La regeneración moral de la vida pública es una cuestión de principios, de voluntad y decisión; es también una cuestión de orden en el funcionamiento de nuestro Estado de Derecho, y antecedente necesario para poder recuperar la confianza de los ciudadanos".

El monarca ha considerado que los valores éticos "deben inspirar nuestra vida pública" y asentar también "referencias cívicas" en nuestro comportamiento social.

En la consecución de ese objetivo, Felipe VI ha reconocido públicamente el trabajo que desarrollan las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y la permanente acción de la Justicia.

Felipe VI Ha ratificado el compromiso de la Corona con los ciudadanos, con la democracia y con España.

Felipe VI ha subrayado que quería expresamente hacer la ratificación de esos tres compromisos contraídos en el discurso de proclamación pronunciado hace dos años y cinco meses.

En sus primeras palabras de hoy, ha recalcado que en una monarquía parlamentaria, la presencia del Rey en el Parlamento es la expresión constitucional del vínculo entre los depositarios de la soberanía nacional y el jefe del Estado.

"España no puede negarse a sí misma tal y como es" y no puede "renunciar a su propio ser" como tampoco al "patrimonio común construido por todos y desde el que debemos seguir edificando un futuro compartido".

Sin referirse explícitamente a la situación en Cataluña, ha defendido el respeto y observancia de la ley y de las decisiones de los tribunales porque constituyen una garantía esencial de la democracia.

"En un Estado de derecho -ha proseguido- la primacía de la ley elimina la arbitrariedad de los poderes públicos y asegura el ejercicio de derechos y libertades de los ciudadanos".