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Carlos Herrera  

 

ONDA CERO

Carlos Herrera comenta qué le ha llevado a Portugal a esta situación después de que el primer ministro portugués, José Sócrates ha presentado su dimisión al no obtener el suficiente respaldo parlamentario en su cuarto plan de ajuste

 

EL MUNDO

El rescate de Portugal, a caballo entre el de Grecia y el de Irlanda

Día clave para Portugal, que va camino de convertirse en el tercer país de la zona euro en ser asistido. De momento, la Unión Europea ha dejado listo el nuevo fondo, con más aportaciones de capital, suficientes para afrontar su posible rescate, que podría alcanzar hasta un máximo de 100.000 millones, según el mercado.

La cifra se queda a caballo entre la de Irlanda y Grecia. Dublín recibió una inyección de 85.000 millones para sanear su deteriorado sistema bancario, que necesitaba 10.000 millones para recapitalizarse, crear un fondo de contingencia para eventuales necesidades adicionales de la banca (25.000 millones) y estabilizar sus cuentas públicas.

El ajuste irlandés pasa por recortar 15.000 millones para rebajar el déficit público hasta el 3% del PIB en 2015, un año más de lo inicialmente previsto. El país ha tenido que pasar por recortes salariales, reducción de prestaciones sociales y creación de nuevas tasas.

La popularidad del primer ministro, Brian Cowen, cayó drásticamente y tuvo que convocar elecciones anticipadas.

Por su parte, Grecia necesitó 110.000 millones para salvarse de la bancarrota, con planes de austeridad tan impopulares que levantó a la población contra el Gobierno en numerosas ocasiones, con masivas protestas y huelgas.

El objetivo final del país heleno es ahorrar un total de 30.000 millones de euros, equivalente al 11% del PIB, en tres años para reducir el galopante déficit público del 13,6% a menos del 3% en 2014.

Lo cierto es que el mercado todavía no tiene claro si Grecia e Irlanda serán capaces de salir del atolladero, lo que ha motivado a Moody's y a S&P a rebajar recientemente sus respectivos rating.

 

lainformacion.com

El rescate de Portugal será el último en Europa

La intervención de la economía lusa podría ser la última que viva la eurozona. El motivo es que el siguiente país en la lista negra, España, ya está recuperando la confianza de los inversores.De hecho, el mercado descarta que nuestra economía siga los pasos del país vecino.

El mercado ya ha descontado que Portugal va a necesitar un rescate. Después de las ayudas a Grecia e Irlanda en 2010, los inversores dan por hecho que nuestro vecino va a ser el tercero en caer, sobre todo, tras la reciente dimisión de su primer ministro, José Sócrates.

Portugal precisará del rescate europeo con una probabilidad extraordinariamente alta. Eso es lo que dicta la lógica, y, mucho más importante, es lo que descuentan los mercados, que ayer situaron la rentabilidad de los bonos portugueses en máximos históricos desde que existe el euro”, argumenta Daniel Pingarrón, estratega de mercados de IG Markets.

De hecho, Bruselas no descarta que Portugal necesite ayuda, y ya ha cifrado el coste de la intervención en 75.000 millones.

Pero la buena noticia es que el sentimiento de los inversores también apunta a que ésta será la última intervención en el seno de la Unión Europea. El motivo es que el siguiente país en la lista negra, España, ya está recuperando la confianza de los inversores.

El mercado cada vez está diferenciando más entre los países periféricos y, en particular, España. Por primera vez desde que estalló la crisis de deuda soberana, no todos los bonos de la periferia se están moviendo en la misma dirección. Los bonos españoles se han comportado muy bien desde el pasado mes de enero, gracias a la mejora del panorama económico y la respuesta del Gobierno a la crisis”, asegura el banco británico Barclays.

El también británico Royal Bank of Scotland (RBS), por su parte, opina que "el contagio de la crisis al resto de Europa es probable, pero no vemos que los riesgos españoles sean tan elevados como para situarse justo después de Portugal".

Y las entidades de Reino Unido no son las únicas que piensan que España se ha distanciado de los países periféricos enfermos (Grecia, Irlanda y Portugal). De hecho, muchos expertos aseguran que nuestra economía ha logrado salir del saco de los PIGS, el nombre despectivo -que significa cerdos en inglés- con el que los anglosajones denominan a Portugal, Irlanda, Grecia y España.

Prueba de ello es que nuestros bonos han logrado mantener la compostura ante la crisis lusa y su ya prácticamente garantizado rescate. Al cierre de ayer, la distancia entre los bonos españoles y los alemanes, los más seguros de Europa, bajó un 0,5%, hasta 192 puntos básicos. Esto indica que el riesgo país nacional se mantuvo estable.

Los demás países europeos tampoco sufrieron cambios especialmente significativos. La prima de riesgo de Portugal, por ejemplo, cerró sin cambios (en 447 puntos básicos) y la de Irlanda bajó un 1% (hasta 660 puntos básicos). Mientras