noticia
 
 
Carlos Herrera  

Defiende Herrera en su editorial del martes que "la campaña que existe en España contra la Monarquía no es culpa de Juan Carlos ni de sus conductas"

COPE

 

Señoras, señores, me alegro. ¡Buenos días!

 

Hola, ¿qué tal?, ahí estamos con el ojo puesto de la crecida del Ebro que ya ha provocado inundaciones por todo el cauce del río, el pico se espera en Zaragoza esta tarde, a ver qué pasa. El otro asunto de especial preocupación, la evolución de la pandemia, todavía nos tienen en unas tasas de incidencia mejores del resto de Europa, la verdad, pero como la incidencia hay que mirarla como hay que mirarla, preferimos mirar como siempre la ocupación hospitalaria. Ayer los casos de covid ocupan el 5% de las camas de hospitales en España - el 12,6 de las camas de UCI-.

La variante ómicron, muy transmisible, está llevando a suspender muchas comidas o cenas de Navidad, encuentros, a modificar el formato, a dividirlas en grupos más pequeños, pero ya lo saben ustedes. Y ayer llegó España la primera partida de vacunas infantiles, mañana comenzará la vacunación de pequeños entre 5 y 12 años.

¿Qué es lo que pretenden Podemos y todos los socios del Gobierno?

La noticia ha estado en varios nombres propios. Uno de ellos es el del Rey Juan Carlos que ha quedado libre de la acusación del cobro de comisiones por las obras del Ave a la Meca, es una cosa que cualquiera puede entender con dos dedos de frente. Cuando das una concesión, en todo caso eres tú el que da la concesión, el que recibe la comisión de aquella persona a la que se la has dado. Los reyes árabes no van a necesitar ninguna comisión que le pague aquella persona a quien se le concedió, que fue Adif, Renfe Compañía, el consorcio...Y si don Juan Carlos estuvo y convenció, como hizo, a los saudies, en todos caso debería ser la Renfe, Adif, etcétera, etcétera los que le pagaran una comisión y, ¿ustedes creen que le ha pagado Renfe una comisión a Juan Carlos? Además, el dinero que le ceden, le regala, le dan los saudíes a Juan Carlos se produce tres años antes que el contrato de las vías del AVE. Pues menuda previsión tenían los que lo dieron.

España, pendiente de la documentación suiza de Don Juan Carlos y con el archivo en el horizonte

Miren, el Rey nunca llegó a estar imputado formalmente en lo que la Fiscalía suiza investigaba, que era a Corinna Larsen, él pasaba por ahí y se ha quedado, después de 3 años de diligencias infructuosas archivado. Juan Carlos fue obligado a irse de España hace año y medio por el Gobierno de Sánchez sin que haya pesado ninguna acusación contra él -el mismo Gobierno que ha indultado a golpistas, los catalanes, que envía casa a los terroristas de ETA, etcétera, etcétera, dictó una suerte de destierro contra Juan Carlos y ahora no sabe cómo arreglar el desaguisado. Nunca hubo ningún motivo para que Juan Carlos saliera de España y, ahora, ese extrañamiento es un escándalo que crece cada día que Juan Carlos sigue fuera de España, por lo cual, esta es una buena noticia por lo que habrá que felicitar a Juan Carlos y también al Rey Felipe porque verá con tranquilidad como su padre queda exonerado de esta cuestión. No hubo, nunca, ningún motivo para que este hombre se fuera.

Después de la Fiscalía suiza, ahora es el turno de la Fiscalía de España, la de Lolita Delgado que ha mantenido abiertas investigaciones más allá de lo razonable -de hecho aún están abiertas-, y sin haber sido capaces de encontrar un solo indicio de delito en Juan Carlos, sin haber podido presentar el caso ante ningún juez, eso sí filtrando, maliciosamente, todo tipo de informaciones contra el emérito para dañar su reputación, que es lo que han hecho Campos y Luzón y Lolita Delgado, el Trío Lalala. Y, en cuanto a los odiadores profesionales de Juan Carlos, Podemos, por ejemplo, algún que otro soberbio columnista, que insultando al padre cree que hace algún favor al hijo, pues esos van a seguir a los suyo, pues unos por maldad y otros, por siempre idiotez.

La campaña que existe en España contra la Monarquía no es culpa de Juan Carlos ni de sus conductas. La campaña contra la Monarquía es una campaña en contra de la propia institución porque es la misma campaña contra el sistema democrático del 78. Y para muestra un botón: el artículo que hoy firma del ideólogo de cabecera de El País (que se ha convertido en un periódico podemita, antisistema), donde dice textualmente: “la Monarquía actúa como tapón del sistema”, sí, sí, “la Monarquía actúa como tapón del sistema”, ni Pablo Iglesias lo habría dicho mejor. ¿Qué es lo que pretenden Podemos y todos los socios del Gobierno? Cargarse a la Monarquía para cargarse el sistema, que, a lo mejor, también lo pretende Sánchez, oiga, por eso le da alas, por eso no desautoriza los constantes ataques al sistema, a la Monarquía, la independencia judicial, a cualquier instrumento de control legítimo de poder.

¿Qué coño tiene que pasar para que Sánchez vaya a ver la crecida del Ebro?

Este Sánchez es como es. Lo bueno que tiene la radio es que tiene archivos, guarda las frases. ¿Saben ustedes lo que Sánchez cuando el Ebro creció en el 2015 y él estaba en la oposición, lo que le decía a Mariano Rajoy? Él, Sánchez que no ha tenido tiempo para preocuparse de lo del Ebro, que le daba mucha importancia a lo de las botas manchadas de barro. Estaba indignado.

¿Qué coño tiene que pasar?” Pedrito, venga, vamos a poner la frase actualizada hoy, ¿qué coño tiene que pasar para que Pedrito salgas de..., aunque vayas Falcón, da igual, a ver las inundaciones del Ebro que son, más o menos parecidas o iguales, desde luego en Tudela, peores y en parte de la provincia de Zaragoza, también. ¿Te vas a manchar algo de barro o te quedas en el calorcito de casa?

Veran, ayer pudimos ya ofrecerles, en este programa, el contenido de la carta dirigida a la opinión pública por la familia de Canet, acosada por exigir el cumplimiento de una sentencia y el respeto a sus derechos, pero el discurso del odio no es exclusivo de ese sector del nacionalismo catalán. Fíjense lo que ha pasado ayer en la Universidad Complutense, en la Facultad de Ciencias Políticas -que es el agujero de donde hace años salió el estiércol de Podemos, bueno el estiércol todavía hace de abono, para infectar toda la política española-. Se presentan allí dos demócratas venezolanos, Leopoldo López encarcelado, perseguido por el régimen de Maduro, y Junior García, el líder del Movimiento Archipiélago. Dos demócratas, dos luchadores por la libertad frente a la peor tiranía sudamericana, junto con la cubana. Bueno, pues un grupo de estudiantes se presentó allí a sabotear el acto llamándoles fascitas, fascistas a lo mejor de la democracia. ¿Cómo se puede ser tan tonto, Dios mío, tan inmensamente tonto? Luego recularon en cuanto uno de estos dos se levantó y se les encaró. Eran 30, ya se sabe, los dueños de la Facultad de Políticas.