noticia
 
 
Carlos Herrera  

 

COPE

La actualidad económica en 'Herrera en COPE' con el profesor Gay de Liébana. 

Más que hablar de la España 2050 podríamos concentrarnos en la España 2021, que es la nuestra, aquí y ahora

¡Buenas noticias que levantan los ánimos y nos contagian de optimismo! Casi todo arreglado y sin problemas. Había que esperar al proyecto estratégico “España 2050” para percatarnos de lo bien que se gestiona la economía. Meses atrás ya captamos nuestro potencial con la presentación de “España puede”. España en 2050 será una auténtica flecha. Dentro de 30 años nuestra tasa de paro será del 7%. ¡Notición, Don Carlos! Porque 30 años pasan en un soplo. No importa que ahora nuestro paro oficial sea del 16% y que el real sobrepase el 20%, sino que lo magnífico es que en 2050 España, o lo que quede de ella, solo tendrá un paro del 7%, o sea, la actual media europea. Y más proyectos para una vigorosa España 2050. Aunque el problema será esperar esos 30 años para constatar nuestros impulsos. Y los vaticinios en ese sentido no son muy halagüeños porque año tras año España pierde peso en el ranking económico mundial. Si en 2003 y 2004 ocupábamos la octava plaza, hoy andamos por la zona baja de las potencias Top-20, con riesgo de promoción o descenso a la segunda división mundial.

Y habrá que ver en la España 2050 quién será nuestro dueño. Muchos de los países que hoy catalogamos como economías emergentes y en desarrollo, en 2050 estarán por delante nuestro. Esto pinta a que seremos colonia de capitales extranjeros. A todo ello, Moody's duda de nuestra capacidad de crecimiento en base al plan de recuperación. Una Administración que no funciona, engullidora de los fondos europeos, caracterizada por sus nefastas burocracias, se vislumbra como el gran impedimento para que el dinero procedente de Europa sea efectivo. Entretanto, el BCE advierte de la sostenibilidad de la deuda soberana española, con ese 125% del PIB. Más que hablar de la España 2050 podríamos concentrarnos en la España 2021, que es la nuestra, aquí y ahora.