COPE

La actualidad económica en 'Herrera en COPE' con el profesor Gay de Liébana.

El profesor analiza los datos de febrero del Eurostat, publicados este martes

Transcurren los años, pasan los meses, suman los días, y acá seguimos varados y cada vez más con el paro. En marzo, 3.949.640 desempleados según la Seguridad Social a quienes habría que agregar las 743.628 personas que aún están en ERTE, los miles de autónomos en cese de actividad, los otros miles de demandantes de empleo con disponibilidad limitada y los tantos miles que están en cursos de formación. En definitiva, que sobrepasamos largamente los 5 millones de personas en situación laboral muy complicada.

Y ayer también, Eurostat publicaba los datos de febrero. España vuelve a liderar el paro en Europa, con una tasa del 16,1%, por encima del 15,8% de Grecia, doblando el desempleo de la Zona Euro (8,3%) y a considerable distancia de la Unión Europea (7,5%). En Chequia el paro es del 3,2%, en Alemania del 4,5%, en Malta del 4,4%, en Países Bajos del 3,6%, en Polonia del 3,1% y en Portugal del 6,9%. En EE.UU el desempleo es del 6,2%, en Francia del 8% y en Italia del 10,2%.

El paro juvenil es otra espina clavada en nuestro corazón. España lidera sin discusión, con el 39,6%, los datos de Eurostat. Presente nebuloso, futuro tormentoso, si los chavales están en esas condiciones. Las perspectivas del Banco de España sobre el paro son pesimistas. En el escenario central manejado por el Banco, este año la tasa de paro, en media anual y en porcentaje sobre la población activa, será del 17%, en 2022 del 15,1% y en 2023 del 14,1%. Si la cosa pintara a peor, nos iríamos a más del 18%. Algo hay que hacer para reducir ese fatídico desempleo, mitigar la precariedad del empleo, reducir la temporalidad, capacitar a quienes hoy están sin trabajo para que puedan enrolarse a sectores pujantes en el nuevo contexto económico y, sobre todo, reestructurar nuestro modelo productivo para que haya trabajo.