noticia
 
 
Carlos Herrera  

 

COPE

La actualidad económica en 'Herrera en COPE' con el profesor Gay de Liébana.

Después de casi un año de dejar tiradas a nuestras empresas, el desprestigio del Gobierno es que no ha hecho nada para salvar a la economía española

El Gobierno sigue dando vueltas a eso de conceder ayudas a nuestras empresas para evitar más mortandad. Será, Don Carlos, que la autoridad está con el coche oficial en alguna de los tantos miles de las famosas rotondas del Plan E siguiendo las indicaciones del GPS y anda perdida con el número salida que ha de tomar. Es demasiado tarde, Don Carlos, para ponerse ahora, cuando la tragedia empresarial está consumada, a pensar en alternativas de auxilio para la economía productiva de España. Marear la perdiz en un asunto tan delicado como es el del vital socorro a nuestras empresas para intentar evitar que algunas perezcan, porque lamentablemente muchas otras ya han fenecido y otras están en la sepultura, suena a juego macabro. Después de casi un año de dejar tiradas a nuestras empresas, el desprestigio del Gobierno es que no ha hecho nada para salvar a la economía española – la que más ha caído de toda Europa en 2020 -, provocando su agonía. Y podían hacerse muchas cosas, sin duda. En consecuencia, Don Carlos, infinidad de empresas que se encontraban en una situación económica y financiera aceptable cuando estalló la pandemia y que por tanto eran viables, por culpa de las medidas restrictivas impuestas a nuestra economía sin compensación ni ayuda efectiva alguna, hoy están en mortis causa. El proceder gubernamental ha derivado en que empresas viables muten a la bancarrota y no sobrevivan.

Hoy empieza el Congreso de Faconauto, Don Carlos. Si no hay ayudas para el automóvil, habrá cierres y despidos. Si no hay plan Renove, mal irán las cosas para un sector clave de la economía española. De momento, el automóvil solo recibe más palos, como el impuesto de matriculación. Y la automoción es un tesoro de nuestra economía, Don Carlos, que conviene cuidar