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Carlos Herrera  

 

COPE

El académico de la RAE ha presentado su último libro, “Tercer Acto”, que constituye un implacable retrato generacional sobre la Cataluña franquista

El escritor Félix de Azúa ha presentado este miércoles en 'Herrera en COPE' su último libro, “Tercer Acto”, que constituye un implacable retrato generacional que sigue a un grupo de amigos en su peripecia vital por la Cataluña franquista, la disidencia francesa, la modernización de España y el declive físico y mental de todos y cada uno de sus miembros. Según ha dicho, la obra es una “falsa autobiografía” porque, aunque los personajes “se parezcan a gente que uno puede conocer”, en realidad están “falsificados”. El académico de la RAE ha explicado, no obstante, que la obra forma una “autobiografía” de lo que él ha conocido porque está cerca de “salir ya del teatro”.

Azúa ha dicho que a día de hoy hay políticos que vuelven recurrentemente al Franquismo porque “contra Franco vivíamos mejor”, parafraseando a Vázquez Montalbán. “En cuanto murió desapareció el enemigo. Era muy fácil ser rojo contra Franco”, ha señalado. “Poco a poco en la izquierda se han ido dando cuenta de que tienen que reinventarse a Franco. Un día lo desentierran, otro vuelven a la Guerra Civil, otro quitan calles, otro ponen estatuas... Esta gente te enloquece. La izquierda no tiene enemigo y se lo tiene que inventar. Todos somos fachas menos ellos, sus papás y sus mamás”.

El escritor también ha señalado que la Barcelona de antes, la de su novela, era “la capital cultutal de España”, pero en estos momentos es “mucho más capital cultural Sevilla que Barcelona”. “Eso duró hasta después de los Juegos Olímpicos”, pero ahora Cataluña “es una comunidad perdida por completo”, a lo que ha ayudado el nacionalismo del PSC, ha deslizado.

“El Gobierno actual es muy próximo a los independentistas. El nacionalismo se cura viajando, pero se multiplica por cien si le das dinero. Se les ha dado tal cantidad de dinero, todos los gobiernos de todos los partidos, que la mitad de la población cree que si dejan el nacionalismo de lado se quedarán sin empleo. La cosa está perdida”, ha selañado el académico, “pero como también está perdida España, nos fundiremos todos juntos”.

Félix de Azúa también se ha pronunciado sobre el vídeo grabado por cerca de 200 intelectuales en apoyo del Rey, que ha sido criticado por algunos sectores de la izquierda. “Los de Podemos siguen agarrados a las ideas de los años 30 del siglo pasado. Los verdaderos conservadores, los auténticos reaccionarios son Podemos y su amiguito, el PSOE sanchista, la izquierda reaccionaria”, que ha calificado el articulista Félix Ovejero.

A juicio del escritor, “el Gobierno actual es un Gobierno prácticamente dictatorial. La mitad del Gobierno es peronista, chavista y leninista. ¿Qué esperas? La dictadura. Iglesias le está imponiendo a Sánchez el modelo venezolano. Le está convenciendo de que él sería un buen Chávez y nos van a llevar a la ruina”, ha sentenciado.

COMPRAR EL LIBROUna novela que cierra un ciclo dentro de la obra de Felix de Azúa. Un retrato generacional desde la Cataluña franquista hasta la aparente modernización de España.

Esta novela es un brillante e implacable retrato generacional que sigue a un grupo de amigos en su peripecia vital por la Cataluña franquista, la disidencia francesa, la modernización de España y el declive físico y mental de todos y cada uno de sus miembros.

Un viaje resumido a traves de imágenes fugaces y saturado de estimulantes lisergicos, tertulias parisinas, tabernas barcelonesas, viajes ampurdaneses, coros eslavos, visitas a Jünger... todo sazonado con la mirada lúcida y el humor característico de un escritor imprescindible para entender a toda una generación de intelectuales y literatos. La filosofía, la muerte, la paternidad, la frivolidad y la locura son solo algunos de los temas de una novela que, en cierto sentido, cierra un ciclo en la obra de su autor.

La crítica ha dicho sobre Genesis:

"Ni se ha encerrado a complacerse con su mitología ni a prolongar ningún tipo de virtuosismo: Felix de Azúa sigue trabajando en un tradición abierta, disconforme, tratando de ver algo en medio de la actual oscuridad." Andreu Jaume, El País